martes, 22 de junio de 2021

Oferta de másteres de Periodismo Deportivo en las universidades españolas para el próximo curso

El periodismo deportivo es una área informativa de un alto impacto social que ha despertado en los últimos años un interés creciente por parte de las instituciones académicas hasta el punto de que cada año la oferta de másteres y títulos de posgrado sobre este campo de estudio e investigación no deja de aumentar en las diferentes universidades públicas y privadas.

Al abanico de posgrados ya existentes en este ámbito, en estos últimos años se han ido incorporando nuevos títulos de otras instituciones académicas interesadas en potenciar esta formación especializada. El último en incorporarse ha sido el Máster en Comunicación Deportiva que oferta la Universidad Pontificia de Salamanca. Se trata de un título propio que toma el testigo del máster oficial que sobre esta misma temática se impartió en esta Universidad entre 2012 y 2017. Uno de los rasgos diferenciadores de este título es su apuesta por la multidisciplinariedad temática y un profesorado también internacional.

También hace tres años la Universidad Nebrija lanzó su Máster en Periodismo y Retransmisiones Deportivas, en colaboración con Movistar +; o la Universidad Europea de Madrid, pasó a ofrecer su Máster Universitario en Comunicación y Periodismo Deportivo, único oficial de esta lista, también en lengua inglesa.

La modalidad presencial coexiste con la online, la cual ha cobrado aún mayor relevancia dada la situación generada por la pandemia del COVID-19. La Universidad Católica San Antonio (UCAM) de Murcia aspira a organizar la cuarta edición de su máster en línea, mientras tanto la CEU San Pablo-Marca como el Centro Universitario Villanueva, adscrito a la Universidad Complutense de Madrid, volverá a ofrecer su título a distancia aprovechando el éxito de las ediciones celebradas de su máster presencial.

En un momento en el que comienzan a abrirse los periodos de preinscripción y matriculación para el próximo curso académico, ofrecemos aquí un elenco de los centros universitarios españoles que incluyen en su oferta académica un máster sobre esta especialización periodística para 2021-2022. Además, ofrecemos una comparativa de precios:

. Máster Universitario de Comunicación y Periodismo Deportivo. Universidad Europea de Madrid (UEM). Decimoquinta edición. Máster oficial. En colaboración con la Escuela de Estudios Universitarios Real Madrid. Campus de Villaviciosa de Odón (Madrid).
Precio: 14.500 euros 

. Master in Communication and Sports Journalism. Universidad Europea de Madrid (UEM). Tercera edición. En colaboración con la Escuela de Estudios Universitarios Real Madrid. Campus de Alcobendas (Madrid)
Precio: 16.700 euros

Máster en Periodismo DeportivoUniversitat Pompeu Fabra. Máster propio. Novena edición. Barcelona.
Precio: 8.100 euros 

. Máster en Periodismo Deportivo. Universidad de Sevilla. Título Propio en colaboración con el Sevilla F.C. Novena edición.
Precio: 2.494 euros

. Máster en Periodismo Deportivo MARCA (presencial). Novena edición. Título Propio de la Universidad CEU-San Pablo (Madrid)
Precio: 10.500 euros

. Máster en Comunicación y Periodismo Deportivo MARCA (online). Decimotercera edición. Título Propio de la Universidad CEU-San Pablo (Madrid)
Precio: 4.800 euros

. Máster en Comunicación Deportiva. Periodismo Deportivo y Gestión de la Comunicación. Universitat Ramón Llull (Blanquerna). En colaboración con el Fútbol Club Barcelona. Se imparte desde 2012 como posgrado, desde 2014 como máster.
Precio: 6.995 euros 

. Máster de Periodismo Deportivo (online). Título Propio de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) (Murcia). Cuarta edición. 
Precio: 3.200 euros

. Máster Periodismo Deportivo. Centro Universitario Villanueva (Madrid). Octava edición.
Precio: 9.900 euros 

. Máster Periodismo Deportivo online. Centro Universitario Villanueva (Madrid). Cuarta edición. Precio: 3.900 euros 

. Máster en Periodismo y Retransmisiones Deportivas. Universidad Nebrija (Madrid). Cuarta edición. Precio: 9.500 euros (precio del año pasado, pendiente de actualización)

. Máster en Comunicación Deportiva. Universidad Pontificia de Salamanca. Primera edición como título propio (entre 2012 y 2016 celebró sucesivas ediciones como máster oficial).
Precio: 7.050 euros

. Máster de Periodismo Deportivo. Escuela de Negocios de la Cámara de Comercio de Sevilla  (Sevilla). Sexta edición. 
Precio: 6.500 euros 

. Máster en Periodismo Deportivo Multimedia. CES Escuela Superior de Imagen y Sonido. Título propio de la Universidad Europea Miguel de Cervantes (UEMC)
Precio: 7.000 euros (precio del año pasado, pendiente de actualización)

Máster en Comunicación Deportiva de la Universidad de A Coruña. Sexta edición. Precio: 5.500 euros.


Junto con estos especializados en periodismo deportivo, sobresale el Máster en Innovación en Periodismo, que también incluye un módulo relacionado con esta materia. Es un título oficial de la Universidad Miguel Hernández de Elche, que prepara su novena edición en la modalidad online.  
Precio: 2.356 euros


(post que actualiza el publicado el 4 de junio de 2020)

lunes, 21 de junio de 2021

"Píldoras medicinales" para elevar la calidad del lenguaje en la prensa deportiva

Álex Grijelmo es un pertinaz estudioso del uso del idioma. Autor de numerosas obras relacionadas con la historia y el manejo de las palabras y de varios libros de estilo periodísticos, entre ellos las últimas ediciones del confeccionado por El País, Grijelmo ha publicado recientemente el volumen Con la lengua fuera, una recopilación de los artículos con los que colaboró en el diario deportivo AS, durante cuatro años, entre 2016 y 2019. La razón de publicarlo más allá del periódico, según el autor, es darlo a conocer al "público general que está interesado en cualquier asunto que concierna a la lengua española y su tratamiento en los medios de comunicación pero no lee la prensa deportiva".

Si bien esta no es la primera incursión de este periodista en el análisis del léxico deportivo (en casi todas sus obras hay referencias a las particularidades de este lenguaje especializado), este libro profundiza en las virtudes y en los deslices que cometen habitualmente los periodistas que escriben sobre competiciones. Las palabras deportivas se forjan a partir de una dualidad que las hacen ser extraordinariamente interesantes para su estudio. Como el propio autor resume, "se mueven a menudo en la frontera que separa el vocabulario tradicional, de un lado, y la innovación y los extranjerismos, de otro".

Asegura que esto se produce también porque en este terreno abundan comentaristas que, tras haber sido grandes estrellas en sus especialidades (exfutbolistas o exdeportistas retirados, aunque también profesionales de la información), se acercaron a los medios sin una preparación específica, lo que pudo contribuir a la expansión y fijación de "algunas fórmulas que empobrecen el lenguaje o lo privan de la eficacia expresiva (y por qué no, también de la belleza) que cabría alcanzar con un uso más esmerado". No obstante, a pesar de sus debilidades, este lenguaje hace gala también de notables fortalezas, por lo que el autor no esconde palabras de elogio hacia las aportaciones certeras, los hallazgos léxicos y las metáforas ocurrentes que suelen poblar las crónicas de la especialidad.

Esta serie de artículos, ahora en forma de libro, propone cómo mejorar el estilo a la hora de informar sobre deporte en sus diferentes modalidades. Como indica en el prólogo el exdirector de AS, Alfredo Relaño, aquí se recogen una serie de "píldoras medicinales" con las que se pretendió combatir en el periódico algunos vicios arraigados en la escritura sobre deportes desde hace décadas, una realidad que se ha visto acrecentada en los últimos años con "el lenguaje abreviado llevado hasta la perversión del mundillo digital"

Muchas de las propuestas que se publicaron en estas columnas luego quedarían recogidas en el libro de estilo que el propio Grijelmo elaboró para el diario AS a principios de 2019. De hecho, como ha llegado a reconocer el autor, algunas de esas recomendaciones prosperaron y en la actualidad se emplean en el periódico. Este es el caso, por ejemplo, de estadía, que en AS sustituye con ventaja a stage a la hora de designar las estancias de pretemporada. Otras, en cambio, asegura que no han alcanzado éxito alguno, como, por ejemplo, el defectuoso medirse a (en lugar de medirse con) o las concordancias y las correlaciones de tiempos verbales (especialmente en las oraciones condicionales ("si el equipo empatase, necesitará (en vez de necesitaría)").

Más allá del grado de éxito que hayan tenido en el uso por parte de los periodistas deportivos del diario y de otros profesionales y aficionados, recogemos aquí algunas de esas píldoras de conocimiento incluidas en esta obra.

Un breve glosario de recomendaciones y aclaraciones

. calificación: para que una persona logre una calificación adecuada le hará falta el juicio de alguien ajeno, como ocurre con los jueces en deportes como la gimnasia, los saltos de trampolín, la natación sincronizada o el patinaje artístico. En la previa de los grandes premios, lo que los pilotos de motos y de Fórmula Uno buscan es la clasificación. Un falso amigo, un error más de traducción. 

. colegiado: no todos los árbitros son colegiados (pertenecientes a un colegio), por lo que no siempre se produce aquí sinonimia entre los dos términos. El autor apela a la búsqueda de otras fórmulas, ya sean antiguas ("trencilla") como de otras latitudes del español. Incluso sugiere otras posibilidades que, por ahora sepamos, a nadie se le ha ocurrido ("silbatero").

. cuerpear: argentinismo cada vez más utilizado en las narraciones de fútbol, aunque con un sentido diferente al original: mientras allende el Atlántico se usa como sinónimo de "esquivar" (mover rápidamente el cuerpo para evitar un contacto indeseado), aquí equivale a "forcejear" (los futbolistas chocan con sus hombros para hacerse con la pelota).

. final four: "la final solo puede ser a dos", sentencia. Esta expresión inglesa se tradujo más como "final a cuatro", cuando en realidad se debería traducir como "los cuatro últimos". Mejorable traducción y oxímoron resultante. El autor también sugiere "fase final entre cuatro".

. gol fantasma: la llegada del videoarbitraje puede dar por terminada la expresión "goles fantasma", que podrían dar paso a la denominación "goles de VAR".

. gol en propia: se trata de una locución que se extiende en las narraciones como fórmula abreviada de "gol en propia meta". En principio, no hay nada que oponer, si bien recuerda que eso no debería conducir al arrinconamiento de alternativas más arraigadas en nuestro idioma, en España (autogol) y en países sudamericanos (gol en contra).

. goleada: aunque queda claro que se refiere a "abundancia de goles" o a la "gran diferencia de goles por la que un equipo gana a otro", es más discutible indicar a partir de cuántos tantos o diferencia el resultado se convierte en goleada. A este respecto, Grijelmo escribe: "El 3-0 se repite en los archivos junto con la palabra “goleada”, y parece claro que ese tanteador señala en la práctica el tope mínimo para usar tal vocablo".

. hacer aguas: un equipo no "hace agua", porque eso significaría "orinarse", por lo que la forma correcta para expresar que un equipo o una de sus líneas de muestra débil es hacer agua (en singular).

. más líder: "¿acaso el primero puede ser "el más primero"?". Parece más bien una redundancia.

. palo corto: todos "los palos (postes) son iguales", por lo que no hay ni palo corto ni largo. En todo caso, este último sería el travesaño o larguero.

. radical: en realidad "radical" no es sinónimo de "violento" (en referencia a seguidores de un equipo), sino más de "fundamental o esencial", "total o completo" o "partidario de reformas extremas". A este respecto, asevera lo siguiente: "Los mal llamados radicales de los equipos rusos o franceses, y antes de los ingleses, son más bien "violentos", "ultras", "vándalos", "salvajes", "destructores", "bárbaros". Disponemos de palabras suficientes como para no necesitar que se manche la idea de lo radical. Ese adjetivo, que tantas reformas importantes procuró a cargo de personas de bien en distintos ámbitos políticos, no debería arrojar la sombra de la violencia sobre quienes son o fueron radicalmente demócratas".

. rechace: ya no hay motivo para rechazar la palabra "rechace", que, debido a lo extendido de su uso entre la población, acabó en el Diccionario de la lengua española en 2014, donde tiene esta definición: "En el fútbol y otros deportes, acción de rechazar". Es sinónimo de rechazo, empleado como opción preferente por muchos comentaristas cuando la anterior aún no figuraba en el diccionario.

. testarazo: "Es lógico que pensemos en "testarazo" como "golpe dado con la cabeza" ("testa" en latín, significaba "cráneo"). Pero desde 1984 la Academia recoge una segunda acepción de ese término: "golpe, porrazo, encuentro violento".

. tifo: la expresión 'fare il tifo' no es "hacer el tifo" (esta palabra en italiano no equivale a "mosaico", como ha pasado a utilizar en la prensa deportiva española), sino a "animar con pasión".

. transfer request: fórmula no vinculante, aunque suele aceptarse en el fútbol inglés, por la que el futbolista que pretende irse a otro equipo pide por escrito que el club facilite el traspaso, propone traducirlo como solicitud de traspaso, no "transferencia solicitada".

. vuelta rápida: en los deportes de motor, todas las vueltas que hacen los pilotos son rápidas, por lo que hay que insistir en que la noticia, el logro de verdad, es que consigan la vuelta más rápida

miércoles, 9 de junio de 2021

Goga Ruiz Sandoval: "Aunque interese llegar al fútbol como meta mayor, otros deportes pueden abrir horizontes para perfeccionarse como profesional"

'Goga' Ruiz Sandoval en una cobertura. Foto: Facebook.

Georgina Ruiz Sandoval, más conocida como 'Goga', es una de las voces más autorizadas del periodismo deportivo en lengua española a la hora de informar sobre ciclismo. Es, además, un referente que ha abierto nuevos caminos para la profesión al haber sido la primera mujer en Latinoamérica en narrar fútbol americano y la primera en el mundo en hacer crónica de ciclismo en televisión en español.

Esta mexicana, graduada de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García en Ciudad de México hace más de tres décadas y radicada en Estados Unidos desde hace 22 años, ha desarrollado su labor profesional como reportera, presentadora y narradora de televisión cubriendo una gran diversidad de modalidades y competiciones deportivas.

Además de cubrir Juegos Olímpicos, Juegos Panamericanos, Mundiales de atletismo y Super Bowls, lleva contando lo que acontece en las grandes vueltas y eventos World Tour de ciclismo desde hace veinte años de forma ininterrumpida. Antes con ESPN Internacional, Goga trabaja en la actualidad para la cadena colombiana Caracol TV, para la que ha contado, con enorme emoción, cómo Egan Bernal ganó recientemente el Giro de Italia. 

Hemos conversado con ella para conocer las particularidades de la superespecialización en ciclismo y de la crónica en televisión, así como las claves que le han llevado a construir su marca periodística personal, Bici Goga, que es el nombre de su blog personal. Desde aquí, desde sus cuentas en Twitter y Facebook y su podcast 'Pendiente Máxima', desarrolla una enorme labor de seguimiento y difusión del deporte de la bicicleta, con un claro enfoque latinoamericano.


- ¿Cuándo decidió usted que quería especializarse en ciclismo por encima del resto de deportes?

- Siempre estuve conectada con los deportes de corte olímpico y el ciclismo de pista fue una de las primeras disciplinas que tuve como asignación en México. Sin embargo, fue la Vuelta a México a principios de la década de los 90 la que me introdujo a la ruta. En esos años Raúl Alcalá, el mejor ciclista mexicano en la historia, era una figura importante y la carrera de 15 etapas trajo a varios invitados internacionales como Gianni Bugno, Laurent Fignon y Lance Armstrong. Ahí puede estar en carrera en diferentes vehículos de caravana y ver los movimientos de cerca, la estrategia y la naturaleza del deporte. Quedé literalmente prendida del ciclismo y en 1993 pude viajar a mi primer Tour de Francia, lo que me abrió los ojos y el horizonte a la cobertura del deporte en Europa. Ver a Miguel Indurain, Claudio Chiapucci, Tony Rominger y otros en acción fue una gran motivación para continuar la especialización en este deporte.

- Usted es marca periodística personal, reconocida internacionalmente por su dedicación al ciclismo. Me imagino que en ese proceso de construcción de su marca, le habrá ayudado mucho tener su blog personal y presencia en redes, ¿no? 

- Aunque lo mío es la crónica o narración de transmisiones en vivo, siempre he considerado muy importante tener el ejercicio de la escritura. Es un gran reto personal tener un espacio donde poder verter más análisis y conceptos después de las etapas, o realizar algún análisis previo a las grandes carreras. El blog es como un remanso donde puedo continuar con las emociones del día de carrera, buscar otros ángulos y complementar con entrevistas. Las redes las he utilizado como un ejercicio de crónica constante, no tanto de opinión sino de información de carrera y corredores, con un gran énfasis en los ciclistas latinoamericanos. La opinión la guardo más para el blog o el podcast. Creo que el Twitter como herramienta editorial tiende a polarizar demasiado, porque el tono de la información en breves mensajes puede ser tomada fuera de contexto. Incluso creo que hay gente que ni siquiera lee completos los tuits. 

- ¿Ser marca periodística personal supone una carga de trabajo extra a su labor de reportera/narradora, ahora en la televisión colombiana?

- Tener un nombre o "marca" creo que no puede basarse solo en el trabajo de televisión en vivo, por eso he tratado de diversificar mi aporte por diferentes vías. Escribo, grabo podcast y también hago reportajes especiales en video en carrera. No me consideraría una cronista o narradora completa si no viajo por lo menos a algunas carreras al año, para mantenerme al tanto y conectada con corredores y todas las demás fuentes de información, incluidos mis colegas. Recibo, además, invitaciones constantes a hacer entrevistas con otros medios y a dar charlas en diferentes universidades en Colombia, lo que enriquece mucho también mi percepción de las nuevas generaciones y su visión del periodismo deportivo.


"Tener un nombre o "marca" creo que no puede basarse solo en el trabajo de TV en vivo, por eso he tratado de diversificar mi aporte por diferentes vías: escribo en el blog, grabo podcast y también hago reportajes especiales en video en carrera"


- Se lo preguntaba porque hay colegas a quienes les cansa mucho estar continuamente en redes sociales. ¿Se dosifica usted en este sentido?

- Antes sí me preocupaba demasiado por tener contribuciones múltiples en Twitter sobre todo, aunque también tengo mi cuenta de Instagram y la página pública en Facebook. Pero poco a poco me he adaptado a que si no tengo algo realmente de impacto, o no sigo alguna carrera en vivo con trinos (tuits), no fuerzo mi presencia en redes. Instagram creo que es una herramienta para mostrar fotos exclusivas o de impacto y también aprovecho para dejarme ver un poco mi vida personal y hobbies. La página de Facebook es estrictamente informativa y es más bien herramienta de promoción de mi contenido editorial y transmisiones de TV. 

- Usted viene de un país eminentemente futbolero y ha acabado cubriendo casi de todo menos fútbol. ¿Hay sitio para que el periodismo deportivo pueda atender intereses generales sin desatender otras modalidades? Es una pregunta que cobra más vigencia a pocas semanas de los Juegos Olímpicos...

- En México, como en todo, el mundo el futbol es la fila donde todo se quieren formar, como el deporte tiene mayor impacto y presupuesto. Yo creo que aun cuando a alguien le interese llegar al futbol como meta mayor, otros deportes pueden abrir horizontes para perfeccionarse como profesional y en el camino quizás se encuentre una vocación distinta. Cuando yo me inicié, hace 30 años, a las periodistas mujeres se le asignaban deportes amateurs y olímpicos, como si fueran más fáciles de cubrir. Gracias a que, por ejemplo, yo pude descubrir el ciclismo, me pude poner en primera en la fila de la cobertura de este deporte y no tuve que esperar mucho para poder tener la especialización suficiente y las oportunidades de ser la primera en una disciplina fuera de la cancha.


"Cubrir el ciclismo para la TV en Colombia es una gran responsabilidad. Una gran parte del público aún no aprecia lo que hacen sus ciclistas si no es a través de las victorias. Por eso quiero transmitir la esencia del deporte sin que importe tanto el protagonista"


- ¿Cuáles son las singularidades que tiene cubrir el ciclismo y sus grandes vueltas?

- El ciclismo creo que nos da un ambiente especial para enmarcar su cobertura, con escenarios cambiantes, cultura y comida diversas. Estar en carrera también implica un “corre y corre” y disciplina para el reportero, que no se puede perder ni la salida ni la llegada y mucho menos el medio de la etapa. El que no ve la carrera no puede hacer buenas preguntas para abrir puntos escondidos de estrategia o fortaleza/debilidad de un ciclista. Me ha tocado ver casos de reporteros que estando en carrera no saben qué pasó.

Para una transmisión de TV estar en locación abre una infinidad de puntos finos a analizar, porque se ha pasado por el perfil de las etapas y se puede dar una perspectiva diferente, con entrevistas previas formales, charlas informales también, así como conocimiento fino de las llegadas y las entrevistas posteriores. Desafortunadamente por cuestión de presupuesto –y ahora también de pandemia—estar en las carreras es cada vez mas difícil. El público sabe cuando uno está en carrera, lo nota en la descripción de muchos detalles. 

- Por cierto, ¿es usted más de Giro o más de Tour? 

- Este es un duelo que uno siempre tiene en la cabeza y el corazón. El segundo se lo lleva el Giro. Italia me parece un país hermoso que acompaña muy bien a su carrera con la pasión que despierta, además de la montaña tan dura que tiene. El Tour lo gana la cabeza, porque no hay duda de que la estatura de un corredor está directamente relacionada con su paso por la ronda francesa. Es un paquete comercial completo, una maquinaria casi perfecta. La manera en que se produce al aire y cómo se muestra al mundo no lo tiene otra carrera.

- ¿Qué significa cubrir este deporte para Colombia, donde, aquí sí, el ciclismo es deporte rey?

- Es una gran responsabilidad, porque aún una gran parte del público no conoce todos los elementos para valorar al deporte por sí mismo, fuera de los resultados. Mi intención siempre es que la gente pueda apreciar la esencia del deporte, sin importar quién es el protagonista. Con la llegada de los resultados tan destacados en los últimos años de los ciclistas colombianos, una gran parte del público no aprecia lo que hacen sus ciclistas si no es a través de las victorias. Y también abrir el horizonte fuera de las tres grandes es algo que me interesa mucho, que el público conozca otras formas de correr y la historias de muchas carreras que no tienen el brillo de las World Tour. 

También me preocupa hacer un buen balance entre las emociones que provocan las carreras sin tener tonos exacerbados en las trasmisiones en vivo. Si hay algo que me enorgullezca, es que me consideren una cronista emotiva pero objetiva y justa.

- ¿Su pronóstico para el próximo Tour?

- Me llama la atención lo que dicen algunos directores deportivos del pelotón que no son del Ineos Grenadiers o del Jumbo Visma, porque estos últimos verán la carrera con una temática única. Si el resto del pelotón no tiene las herramientas y el talento para rivalizar hombre a hombre, no les tocará más que tartar de hacer la carrera más abierta y tomar las oportunidades. Creo que ya vimos algo en este tono en el Giro, aunque el Tour tiende a ser más disciplinado porque hay muchas etapas para sprinters con trenes muy formales. Me causa mucha curiosidad cómo será la defensa de Tadej Pogačar, porque aunque tiene la fortaleza, aún le queda espacio para seguir madurando como líder. Primoz Roglič me parece que ya sufrió todos los escenarios posibles y que este puede ser su Tour de France. Pero... Richard Carapaz ya tiene una gran figura dentro del esquema del Ineos y es un corredor que puede relevar a Thomas y Porte en cualquier momento de carrera. Si hay algo que le sobra a Carapaz, es valentía.


jueves, 3 de junio de 2021

Jesús Lagos: "En el análisis de datos deportivos los medios se han dejado comer un trozo de pastel y otros hemos empezado a saborearlo"

 

La visión externa al periodismo también es valiosa en los tiempos que corren hasta el punto de que en muchos casos se está captando ese talento 'de fuera' para las redacciones de medios periodísticos importantes. En una era en la que se demandan nuevos perfiles profesionales y en la que en muchos casos se están incorporando expertos en otros campos para aprovechar ese conocimiento y trabajar de la mano de periodistas a la hora de construir historias, el análisis de datos se ha constituido como un área de importancia creciente, en el periodismo en general y, muy especialmente, en el periodismo deportivo.

Hemos entrevistado a Jesús Lagos, ingeniero y experto en big data aplicado al deporte, para acercar el mundo del análisis de datos deportivos un poco más al lector y también para conocer cómo el periodismo puede aprovechar las nuevas metodologías de trabajo del análisis de datos en la información deportiva. Tras un etapa formativa y profesional ligada al conocimiento y la aplicación de técnicas geoestadísticas (fue consultor de geomarketing y jefe de producto de Big Data para diversas empresas), se especializó a través de un máster de datos aplicados al deporte, lo que -asegura- le dio "la oportunidad de tener acceso a fuentes de información de un valor muy alto". Desde hace más de dos años se dedica al análisis de datos y lo hace inmerso en tres proyectos diferentes desde la óptica profesional pero muy ligados entre sí como estrategia de producto. 

El primero, desde el punto de vista de la difusión, es su cuenta de twitter @vdot_spain, donde publica hilos, información y visión sobre la actualidad del fútbol con la perspectiva del dato. El segundo proyecto es el canal en Youtube Planeta DataFutbol, conjuntamente con Miguel Ángel García, periodista de Marca, donde efectúan una aproximación al mundo del dato de manera más pausada y amena, desarrollando más los temas pero con el objetivo de generar una marca personal propia. Además, dirige junto a Mario Prieto scoutanalyst, firma que ofrece servicios de consultoría y desarrollo para clubes y profesionales del fútbol, desarrollando herramientas de análisis táctico, scouting y proyectos. 


- ¿Qué está sucediendo para que, de un tiempo a esta parte, haya eclosionado tanto el mundo de los datos en torno al mundo del deporte? 

- Esta eclosión viene acompañada de una oferta masiva de formaciones relacionadas con el dato y el deporte, que están generando una burbuja que a día de hoy está muy inflada. Pensemos que en el mundo del fútbol en España hay 42 equipos profesionales que se pueden permitir el lujo, y de esos 42 diría que muchos menos, de pagar el salario de un profesional con estas capacidades. En el sector privado un perfil de datos puede cobrar más del doble de lo que se puede cobrar en el fútbol. Esto hace que el nivel de los profesionales del dato en el fútbol sea aún muy bajo aunque hay profesionales en varios clubes como Levante, Valladolid, y sobre todo en el FC Barcelona que están montando equipos de alto rendimiento. En otras ligas como la inglesa el nivel es infinitamente más alto, acorde al salario y los requerimientos exigidos. En la cultura anglosajona el dato, en el deporte como en la empresa, está mucho más interiorizado.

- En su caso particular, comparte en redes sociales buena parte de sus hallazgos y de innovaciones en el análisis de datos, muy especialmente, sobre atletismo y fútbol... ¿por qué estos dos deportes sobre todo? 

- Mi aterrizaje en el atletismo fue casual; lo practicaba como aficionado junto a mi mujer, que era una atleta que empezó a hacer buenas marcas a nivel popular. Eso me llevó a optimizar su calendario de carreras para competir en aquellas con más opciones en función de rivales y perfil, y en paralelo me formé como entrenador. Eso me llevó a publicar mis análisis y analizar desde un punto de vista más periodístico el atletismo con datos. De hecho tuve la oportunidad de poder publicar varios artículos en la revista Runners World e incluso a analizar tácticas de carreras de maratón para un gran campeón del mundo a través de un conocido atleta español. Yo soy de la opinión de que si algo te gusta y te apasiona, tienes que contarlo, y es lo que hacía con el atletismo. 

- ¿Acaso son estos dos deportes más analizables desde el punto de vista de los datos que otras modalidades? 

- El atletismo, por supuesto, pero no como vemos en redes sociales. Este deporte tiene una fuerte componente de datos pero desde el punto de vista del perfil fisiológico; son datos que entrarían en la parte de salud, altamente protegida por la Ley Orgánica de Protección de Datos. Por ejemplo, la RFEA ha lanzado un programa de monitorización de niños para su control y la detección del talento. 

Y en cuanto al fútbol diría que es de los deportes menos analizables. Los grandes análisis de datos en el deporte provienen de dos deportes, que comparten la principal característica, la NFL y la MBL, y es que se juega por turnos. Es como jugar al fútbol sin transiciones, pudiendo ordenar tu equipo en cada posesión propia y rival. Sería como jugar al fútbol solo con acciones a balón parado. Ese dinamismo del fútbol genera una incertidumbre muy alta, y eso nos lleva a la segunda característica que hace al fútbol no tan analizable: es un juego donde comparte el terreno de juego, donde la ocupación de espacios es vital, pero no por la decisión de una persona, si no por la decisión de 22 jugadores. Aunque la gente no lo crea, el fútbol, dejando a un lado fanatismos y colores, es un deporte mucho más cercano al ajedrez que la mayoría. 

- Pese a ser tan poco analizable, se dedica a ello.

- Justamente por eso mismo. Cualquier pequeña medición de un patrón de juego confiere una ventaja competitiva, y en eso trabajamos, en desarrollar esas ventajas. Lo que nos diferencia a los analistas de datos dentro del fútbol es el enfoque de cómo generamos esa información. Ahora mismo hay dos polos opuestos: lo que denomino el fútbol doctoral (de investigación) y el fútbol anumérico (el tradicional). Nosotros intentamos acercar a ambos desde nuestra experiencia, por eso está Mario, entrenador y exanalista del Sevilla además de ingeniero, y yo. Nuestra metodología es sencilla: nos sentamos con todos los actores principales, entrenador, analistas, directores deportivos, scouters, y detectamos sus necesidades, y se las resolvemos mediante datos. Pero ellos ni tienen que ver ni comprender muchos de esos datos. Lo importante es que nuestra solución se adapte y resuelva su problema. 

- Además del fútbol americano y el béisbol, que usted mencionaba antes, ¿qué otros deportes se prestan más a interpretaciones, lecturas y visualizaciones de corte estadístico y por qué?

- Como comentaba, los deportes de turnos son los más propicios por su propia estructura de juego, y también los de alto número de eventos, como baloncesto y balonmano. En el fútbol hay muy pocos goles, pocos tiros, la intencionalidad no siempre es generar, y eso hace que la comprensión del juego desde la estadística sea compleja. Se ven muchos análisis, pero realmente pocos análisis buenos. Se abusa de términos como el promedio, quizás la medida de centralidad que menos se ajusta al fútbol por aquello de sus distribuciones tan desbalanceadas y con tanta varianza. 

Esto me recuerda otro punto importante, y es la necesidad de formarte en tres vertientes: la visualización (comunicación), la estadística y la programación dejando por contado la formación propia en fútbol. Si fallas en cualquiera de estas tres, el riesgo de cometer errores analíticos es muy alto. Me vienen a la mente multitud de ejemplos de reportajes periodísticos donde se aprecia que la vertiente de contexto y estadística es muy floja. Siempre pongo el mismo ejemplo con los porteros. Se habla de ellos por el número de porterías a cero, goles recibidos, % de paradas,... todas variables donde el portero y su incidencia es muy baja. En cambio tenemos métricas y modelos para ayudar a medir el rendimiento de un portero mucho más ajustado a su verdadero rendimiento. Hace poco hubo un portero que solo encajó un gol, paró el 80% de los tiros, en un partido de la máxima competición continental sudamericana. Ese portero era Enzo Perez, un jugador de campo que por temas COVID tuvo que jugar de portero.


"Para el análisis de datos los deportes más propicios son los que se juegan por turnos (béisbol y fútbol americano) y los de alto número de eventos, como el baloncesto. El fútbol es uno de los menos analizables. Está más cerca del ajedrez que la mayoría"


- Hace ahora un año decidió lanzar Planeta DataFútbol, un canal en Youtube, junto con Miguel Ángel García. ¿Con qué objetivos?

- El objetivo inicial fue la democratización del dato. La gente tenía que pagar para conocer cuáles eran las métricas, pero ¿de qué sirve hablar de métricas si solo las entendemos cuatro? Nosotros tenemos vídeos que la gente paga cursos por saber que son, pero creemos que es mejor difundir gratis y recibir un retorno por otra vía. Si todos conocen bien que es un xG (expected goal) y cómo se aplica, seguro que luego contarán contigo para su desarrollo. Por ejemplo, ahora mismo colaboro con una sección de datos en una radio valenciana en las previas de los partidos para hablar de datos del Valencia. Eso hubiera sido imposible sin un canal donde la gente comprenda de qué hablamos, y por supuesto, el segundo objetivo, es nuestra manera de mostrarnos a los profesionales, de mostrar nuestro producto, que no son herramientas, somos nosotros. Miguel Ángel ha conseguido abrirse hueco dentro de Marca para hablar de datos. 

- El eslogan de este programa es 'Entiende el dato. Disfruta del juego'. Quizá esta sea una de las claves de informar con datos, ¿no? Que estos, sobre todo cuando hablamos de métricas y estadísticas avanzadas, se entiendan.

- Es la clave. A mí no me gusta hablar de datos, me gusta hablar con datos; no me gusta contar historias de datos, me gusta descubrir historias con datos. En el fondo tengo muchas veces más faceta periodística, pero es algo que a quien le gusta comunicar no puede evitar hacer. Y ojo, comunicar es vital. En el ámbito de un club profesional, un analista dispone de 10-15 minutos para trasladar todo su conocimiento antes de un partido. Necesitas acaparar la atención de una plantilla, que te comprendan y que asimilen la información. 

- Cada vez con mayor frecuencia vemos que medios periodísticos deportivos, como The Athletic o L'Équipe, están incorporando a sus redacciones analistas de datos especializados, a veces provenientes de empresas como Opta para escribir historias basadas en datos. ¿Qué le parece esta tendencia y en qué medida cree que desde el big data se puede contribuir a mejorar la calidad de la información deportiva?

- A mí me parece muy acertada. Es una tendencia no solo del mundo del deporte, si no del periodismo en general la de enfocar la información con las llamadas "storytellings". Cada vez es más común leer historias donde el dato es el canalizador, la herramienta de descubrimiento. En medios como El País con Kiko Llaneras, por ejemplo. Lo que sí que haría es romper con la creciente necesidad de usar el término "Big Data". Creo que aleja al lector más que acerca, como una barrera con el lector que siente que es algo que no conoce e incluso desconfía. Volviendo a citar a Llaneras como exponente del periodismo con datos, nunca verás hablar de Big Data, si no de análisis de datos, de su entendimiento, su contextualización y su comunicación. 


"Con el uso adecuado del dato el periodismo puede generar contenido de calidad, diferenciador, que ayude a la comprensión de lo que ocurre o incluso monetizarlo como servicio premium en sus contenidos"


- ¿Se producen errores periodísticos a la hora de enfocar esta construcción de historias a partir de los datos?

- Para contar historias a partir del dato y donde el apoyo visual es básico hay que conocer las reglas básicas de la construcción de una visualización, y vemos cómo en la prensa muchas veces la mayoría no se cumple porque queremos que el dato muestre aquello que queremos contar, y no que el dato nos revele una historia que contar. 

Siempre pongo un ejemplo de una de estas reglas, la veracidad, que muchas veces aunque parece obvia, no lo es tanto. En el fútbol podemos hablar de un término que define muy bien a los equipos, como la cantidad de presiones que realizan en el campo. Si representamos gráficamente esta métrica, veremos cómo el Barcelona es el 13º equipo que más presiones realiza, y aunque estamos diciendo la verdad, realmente no es un dato veraz, dado que la realidad es que el Barcelona es el equipo que más posesión tiene y no puedes presionar cuando tienes el balón. Por tanto, hay que normalizar ese valor en función de la posesión del rival, y entonces el Barcelona es el equipo que más presiones realiza. Ambas afirmaciones son ciertas, pero veraz solo hay una. 

Con el uso adecuado del dato el periodismo puede generar contenido de calidad, diferenciador, que ayude a la comprensión de lo que ocurre o incluso monetizarlo como servicio premium en sus contenidos. 

- Teniendo en cuenta que los medios periodísticos se dirigen a una audiencia amplia y diversa, quizá ese gran valor diferenciador al que alude ya no solo sea informar con datos sino sobre todo explicar esas estadísticas avanzadas para que todo se comprenda mejor...

- Es la clave, sin culturización o evangelización del dato es muy complejo informar con el dato. Pero no solo del lector, si no de las redacciones, o los editores. Por ejemplo, ahora mismo se debate sobre el nuevo entrenador del Real Madrid. ¿Algún medio ha publicado alguna noticia sobre la idoneidad de diferentes entrenadores en función de los números que atesoran en el pasado? ¿Cómo se parecen a Zidane entrenadores como Pochettino, Allegri o Conte? Recientemente el Valencia ha firmado a Bordalás. En la radio dedicamos 15' a hablar de Bordalás y sus números, cómo podría afectar su modelo a una plantilla como el Valencia, su estilo. ¿Generó más audiencia? No lo sé, lo que sí que creo es que ese es el camino, y lo vemos en redes sociales, donde hay periodistas que abordan el juego desde esa perspectiva con tal éxito que ha levantado polvareda en otros compañeros de profesión.

- Ahora se incorporan también a la explicación y el análisis del periodismo deportivo eso que llamamos "estadísticas avanzadas"...

- Creo que debemos dar un paso atrás en las estadísticas avanzadas, partiendo desde la definición de "avanzadas", que para mí son las que provienen de modelos matemáticos, como el xG, xT, VAEP, g+ o EPV. Creo que con estadísticas más elaboradas pero sin llegar a esos niveles se puede explicar mucho mejor el juego. Normalmente las métricas que provienen de modelos matemáticos son más un efecto que una causa. Un equipo puede desplegar principios y subprincipios de juego que hagan que tenga más o menos xG. Lo interesante es medir eso, no solo que tenga más xG que el rival. 

- ¿No sería necesario que los periodistas deportivos se formaran más en datos? Se lo pregunto porque saber de datos ya es una propuesta de valor para cualquier medio deportivo, pero también hay que conocer la materia informativa de la que tratas. Ustedes lo han dicho en su programa: "para analizar datos de fútbol hay que saber de fútbol". 

- Por supuesto. Pero no nos olvidemos, y esto aplica a todo tipo de analistas de datos, incluidos los del fútbol, que formarse en datos incluye aprender a programar, conocimientos estadísticos, de comprensión del juego (o de tu sector) y es un precio muy alto a pagar en términos de tiempo de dedicación y formación. No puedes ser un analista de datos en seis meses. Yo tengo un curso donde en ese tiempo enseño a programar y visualizar, sin entrar en temas estadísticos ni de juego. A mí me sorprende mucho las ruedas de prensa con entrenadores. Entiendo el negocio, pero no entiendo que se deje pasar la oportunidad para hablar de fútbol con un entrenador, hacer preguntas sin querer saber más que el entrenador, pero ¿a quién no le gusta que se interesen por su trabajo sin sentirse fiscalizado? ¿Por qué el periodista ha quedado relegado a un mero conductor sin capacidad de análisis, dejando el peso del mismo a colaboradores deportivos? No puedes pretender que un periodista sepa más que Álvaro Benito, pero creo que los medios se han dejado comer un trozo del pastel, y no nos engañemos, otros hemos empezado a saborearlo, y es una tarta muy deliciosa.