miércoles, 27 de noviembre de 2019

El primer libro de estilo de un medio de comunicación en español cumplió, sigilosamente, 60 años

Es una de esas tantas viejas obras que se citan en muchas ocasiones cuando se habla de estilo y redacción periodística, pero de la que apenas queda constancia en imágenes. Menos aún en internet. De hecho, la que ilustra este post es la primera que usted podrá encontrar en Google al introducir determinadas palabras clave, como título y autor: Manual de Selecciones. Normas generales de redacción, de Jorge Cárdenas Nannetti.

Tampoco ha de resultar extraño que en 2019 se hayan cumplido sesenta años desde que este texto viera la luz y esta efeméride haya pasado inadvertida incluso para muchos estudiosos en la materia que han recogido en sus repertorios bibliográficos la fecha de publicación del que está considerado como el primer manual de estilo de un medio de comunicación en lengua española de la historia. 

Manual de Selecciones. Normas generales de redacción es un texto pionero, sin duda, pero al que cuesta situar en el tiempo y en el espacio, quizá por la dispersión geográfica de los acontecimientos y de sus protagonistas. La obra se publicó en 1959 en La Habana (Cuba) y fue escrita por un colombiano para la edición en español de una revista estadounidense, Selecciones del Reader’s Digest.

Esta guía de estilo, de apenas 57 páginas, tiene como objetivo principal lograr una buena traducción del inglés -lengua original de la revista- al español. Así, tras la "advertencia preliminar" en la presentación de la obra, el autor afirma:

"Consideramos que una traducción digna de publicarse en la Revista o en los libros condensados en nuestra "Biblioteca" no debe recordar al lector su origen inglés, sino que ha de dar la sensación de que el artículo o el libro fueron redactados originalmente en castellano. Los principales requisitos que exigimos son: 1) Fidelidad al original; 2) Buen estilo; y 3) Corrección gramatical".

Este manual, al concebirse para una revista que se difunde a un conjunto de países que comparten un mismo idioma, se fija como meta la utilización de un español internacional, esto es, de un lenguaje que sea igualmente comprensible en cualquier país del arco hispanohablante y que, al mismo tiempo, preserve la lengua española frente a la poderosa influencia del inglés en Latinoamérica en un momento de la historia caracterizado por la expansión de los principales medios de comunicación estadounidenses (agencias y canales de televisión) en la zona.

Índice de contenidos del Manual de Selecciones.

Así, Cárdenas Nannetti aconseja prescindir de toda clase de extranjerismos y de regionalismos, ya que estos no se entienden fuera de su país de origen, mientras "encarece a todos sus colaboradores la estricta observancia de estas normas; no solo porque es indispensable mantener en la Revista uniformidad y consecuencia, sino porque reconoce la responsabilidad que tiene de contribuir a la unidad del idioma español en todo el mundo".

Aparte del propósito de traducir correctamente textos del inglés al español, este manual de estilo compendia una serie de normas gramaticales y ortográficas de suma utilidad aplicables también a la redacción periodística:

"Muchos puntos de gramática, de puntuación y de ortografía (el uso de mayúsculas y los acentos, por ejemplo) pueden ser materia de opiniones diversas; o, más grave aún, de vacilaciones que hacen perder mucho tiempo. Nosotros hemos querido evitar en lo posible estos tropiezos adoptando en los casos más frecuentes un criterio preciso, lo que equivale entregar al traductor el problema resuelto de antemano".

Igualmente, está muy presente la consideración de lo que debe ser un "buen estilo". Cárdenas Nannetti parte de la premisa de que el estilo es una opción, válida siempre dentro de la corrección lingüística, pero que básicamente ha de ser una única opción como respuesta con el fin de dar uniformidad y coherencia al producto periodístico resultante:

"Sin caer en la presunción de creer que nuestro criterio es el único aceptable, o siquiera el mejor, sí opinamos que, en materias controvertibles, es preferible tener una norma clara a no tener ninguna; y que, tanto en la Revista como en los libros editados por SELECCIONES, la falta de uniformidad y consecuencia confundiría al lector, complicaría el trabajo de los revisores y dificultaría la vigilancia constante que deseamos mantener sobre el nivel del estilo y la corrección gramatical".


Una coda, un homenaje

En la labor de investigador, en la Academia, en la ciencia, pero al fin y al cabo como ocurre en el periodismo, el rigor ha de ser la guía, debe constituir nuestro método de trabajo. La inquietud hace el resto y fue esto lo que nos llevó hace ya más de una década, en pleno proceso de elaboración de la tesis doctoral sobre libros de estilo, a comprobar la existencia de este mítico texto en algún lugar, yendo mucho más allá de citas leídas a otros autores. Esas citas de otros han de ser verificadas antes de que pueda propagarse, a veces sin el control deseable, una cadena de referencias que no se apoyen debidamente en la fuente primaria, que puedan incurrir en errores e invaliden el hallazgo. 

Y así fue cómo finalmente pudimos certificar que el manual sí estaba ahí. Localizamos el ejemplar que pertenece al Fondo José Martí y que está cedido a la Biblioteca de la Universidad Europea de Madrid, lo leímos y lo analizamos. Ya es nuestro. Por eso hemos podido escribir esta breve historia para rememorar 60 años de la obra fundacional en la historia de los libros de estilo en español.

jueves, 21 de noviembre de 2019

Carles Vila: "Historias de Outsiders busca diferenciarse trabajando a fondo cada historia y recopilando la vida de atletas por sus actos extraordinarios"

Creatividad de Historias de Outsiders para Twitter con sus últimas historias.

Quizá no hayan pasado a la historia de sus respectivos deportes, pero puede que contribuyeran a cambiarlos para siempre. Por un gesto, por plantearse en serio un reto, más allá de que fuera superado o no, muchos atletas desconocidos para el gran público también esconden historias que merecen ser contadas, sobre todo porque los grandes medios no suelen dejar sitio para ello. En una iniciativa valiosa que aspira a diversificar la oferta habitual del periodismo deportivo, el proyecto Historias de Outsiders llegó el pasado mes de agosto para quedarse. Nació como web y, desde hace unas semanas, también cuenta con su propio programa de radio, en la cadena Radio Kanal Barcelona (RKB). Hemos hablado con el promotor de esta iniciativa, el periodista de Carles Vila, redactor de Mundo Deportivo.


- ¿Por qué se le ocurrió lanzar este proyecto, sobre todo viniendo de alguien que ya trabaja en un medio como MD?
- Es una apuesta personal con la intención de realizar un proyecto periodístico especializado alejado de la dictadura de los parámetros que miden las visitas de webs. Surge como una necesidad profesional, un apéndice de la información deportiva diaria que, en ocasiones, echo de menos en los medios de papel o de web. Elaborar una información 'cociéndola' poco a poco, masticando cada palabra, cada concepto y contrastando las fuentes y enfrentándolas para obtener el mejor producto con el objetivo de explicar la calidad humana en cada historia. Quiero que sea una web de referencia para aquellos que buscan informarse sobre la vida de atletas que se han planteado retos de superación o que han ido a contracorriente defendiendo una idea y rompiendo los esquemas del deporte.

- ¿Por qué el periodismo deportivo actual no se prodiga más en historias de este tipo? Los perdedores suelen encerrar mejores historias que los que ganan. Estos últimos son más predecibles en tanto que habituales y conocidos.
- Cuesta entender que también hay un lector al que le gusta leer más allá del titular de portada. Un texto bien escrito y bien documentado atrae al lector, que lo devora hasta el final aunque sobrepase el límite de cansancio de lectura previsto. Eso sí, no puede ser un bloque de texto granítico: debe adaptarse al concepto web con textos claros y que vayan al grano destacando lo más importante con subtítulos, citas e imágenes. Las historias de atletas que han ido a contracorriente no tienen que ser exclusivamente de perdedores. Su valentía muestra que pueden equivocarse pero su firmeza y convicción es lo que los hace únicos, mientras que para las historias de ganadores ya hay otros que las elaboran. Y muy bien, por cierto. 

- Son historias de todo tipo de deportes y competiciones. Quizá ahí también hace falta que el periodismo deportivo gane en mayor diversidad.
- La clave es diferenciarse y 'Historias de Outsiders' busca eso. La diversidad de atletas que han superado o no los retos que se han marcado indica una variedad de disciplinas deportivas extrapolables a nuestra sociedad que debería reflejar el periodismo deportivo. Cuesta mucho aparecer en los medios si el deporte que practicas es de los llamados "minoritarios" por la poca trascendencia informativa que generan.
Carles Vila, en su programa de radio.





"La diversidad de atletas que han superado o no los retos que se han marcado indica una variedad de disciplinas deportivas extrapolables a nuestra sociedad que debería reflejar el periodismo deportivo"







- ¿Qué historias de las publicadas le han supuesto una mayor descubrimiento, una sorpresa o, por algún motivo, una mayor satisfacción publicarlas?
- De las 16 historias que llevamos publicadas, descubrir historias de superación como la de Yuichiro Miura, un anciano que ha subido al Everest en tres ocasiones o la de la boxeadora Christy Martin que descendió a los infiernos y se recompuso pero sobre todo la historia de los atletas con Síndrome de Banda Amniótica. Su tenacidad para superar una malformación y convertirla en una anécdota para su desarrollo deportivo al más alto nivel me cautivó. Aunque la que me ha provocado una mayor satisfacción al publicarla ha sido la de Terry Fox, un chico que sufrió un cáncer de huesos y que le tuvieron que amputar una pierna. Tomó la decisión de cruzar Canadá corriendo un maratón diario para recaudar fondos para la lucha contra el cáncer. No lo hacía para él sino para los miles de niños que luchan contra esta enfermedad en los hospitales.  

- Ahora el proyecto también pasa a un programa semanal de radio. ¿Qué espera conseguir dando también el salto a las ondas?
- La página web es solamente la base del proyecto. Y como base, debe ser sólida en contenidos y diversa en temas para expandirse hacia otros ámbitos periodísticos y comunicativos como la radio, vídeo o periodismo de datos mediante infografías. Es un trabajo de largo recorrido, con el único 'deadline' de un artículo cada semana para trabajar a fondo cada historia y recopilar las vidas de atletas por sus actos extraordinarios. Quien sabe si en un libro.... 

- ¿Qué historia de las que ha leído alguna vez le gustaría contar?
- Sigo recopilando información para elaborar una historia que escribí en 2015 para Mundo Deportivo sobre el Kibera Celtic FC, un equipo de fútbol compuesto por integrantes de varias etnias de Kenia. Tras las elecciones de 2007, hubo una matanza en un mercado que enfrentó los kikuyu y los luo provocando una cifra de muertos horrorosa. Un tiempo después, el cineasta Jamie Doran estaba rodando un documental sobre esas matanzas y se entrevistó con los dos capos de las tribus que habían perpetrado el ataque. Les contó la historia del Celtic de Glasgow, club fundado por católicos en tierra protestante, y despertó en ellos el interés por crear un equipo de fútbol que uniera a las diferentes tribus. La propuesta fructificó y el Celtic de Glasgow donó su característica camiseta de franjas verdes y blancas que viste desde entonces el Kibera (uno de los barrios más pobres de Nairobi).

- ¿Y cuál esa otra u otras que más le han fascinado siempre cuando supo de ellas?
- Las que más me fascinan son las de deportistas que en un momento dado tomaron una decisión que sabían que les podía generar muchos problemas pero que siguieron con su idea hasta el final aunque algunos acabaran bien o acabaran mal. Como dice el base line de 'Historias de Outsiders': "No hemos venido aquí a hacer historia, sino a cambiarla. Para siempre".


Algunas historias destacadas de outsiders




domingo, 17 de noviembre de 2019

Nuevo libro analiza los perfiles de periodistas de 67 países y cómo estos ven su profesión

Uno de los sesgos habituales de la enseñanza del periodismo y del análisis que se hace de los medios de comunicación es la falta de perspectiva global con la que día a día se mira lo que está ocurriendo. Mientras que la docencia de muchas asignaturas en las facultades parten de parámetros y enfoques del periodismo que se desarrolla sobre todo en un entorno nacional, porque es al fin y al cabo el más conocido y cercano, y ese en el que con mayor probabilidad los estudiantes puedan acabar ejerciendo la profesión; los cambios incesantes que se están produciendo en la postindustria periodística exigen alzar la mirada para saber lo que acontece en otras latitudes, sobre todo en aquellas donde más se está innovando y donde más soluciones se están proponiendo. 

Al mismo tiempo, esa misma perspectiva intranacional, que incluso a veces es más bien de raigambre regional, es la que puede producir 'errores de paralaje' cuando se trata de analizar y proponer el acomodo de alguna fórmula importada de otros modelos periodísticos al nuestro, como si una mera trasposición de aquello que ha supuesto un éxito en otras realidades periodísticas fuera a tener un resultado similar ante un público con hábitos y valores ligados a otra mentalidad, y en unos contextos informativo, empresarial y laboral que poco o nada tienen que ver con los de ese modelo de referencia. 

Hacen falta, por tanto, perspectiva global en el estudio y el análisis del periodismo, pero también relativismo en la aplicación de soluciones para la profesión, de acuerdo siempre a las diferentes culturas periodísticas existentes en el mundo. A esta necesidad responde precisamente el libro Worlds of Journalism (Mundos del periodismo), obra colectiva en la que participan decenas de profesores de Periodismo y Comunicación de universidades de varios continentes para ofrecer una completa y actualizada radiografía de cómo los periodistas conciben en la actualidad sus roles y sus responsabilidades en la misión social de informar a la ciudadanía.

Este libro, publicado este año por la editorial estadounidense Columbia University Press, ofrece un ambicioso estudio que recoge datos de más de 27.500 profesionales de 67 países. El estudio permite observar tanto las tendencias como sobre todo las diferencias de maneras de entender la profesión entre periodistas de unos países y otros, así como la diversa naturaleza de las estructuras informativas y los rasgos demográficos de los trabajadores: género, edad media, años de experiencia, educación, grado de especialización y dedicación, categoría y situación laboral, y tipologías de medio.


Fuente: Worlds of Journalism, p. 73


Como se observa en la imagen inmediatamente superior: 

- La edad media de los periodistas en el mundo oscila entre los 36 y los 38 años. Aunque en el estudio no se han incluido algunas start-ups de creación reciente, la estructura de edad viene claramente determinada por la madurez del sector mediático de cada país (más veteranía donde hay más redacciones).

- Si bien la profesión aún es mayoritariamente masculina (56,6% de hombres frente al 43,4% de mujeres periodistas en términos globales), la presencia femenina es cada vez mayor en las redacciones: ese 43,4% representa un crecimiento de 10 puntos respecto al último estudio global de periodistas realizado por David Weaver en 1998.

- El 89% de los periodistas entre 24 y 40 años tiene un título universitario; entre los mayores de 40 el porcentaje es del 83%. Dos tercios de esos titulados lo son en Periodismo o Comunicación. A más jóvenes, más formación especializada. 

- La mayoría de los periodistas (61,7%) se identifican como generalistas, mientras que casi el 38% desarrollan su trabajo en secciones especializadas. 

- Solo el 47,2% de los periodistas forman parte de alguna asociación profesional.

- Ocho de cada diez periodistas en el mundo trabajan a tiempo completo, mientras que uno de cada cuatro obtiene algún tipo de ingreso por otros empleos fuera del periodismo.


Fuente: Worlds of Journalism, p. 74

- A pesar del imparable auge de los medios digitales, el 49,8% de los periodistas tienen una ocupación en medios con edición en papel: 35% en diarios, 9% en semanarios y 7% en revistas de mayor periodicidad.

- Mientras que cerca del 16% de los encuestados son ocupados en medios solo digitales, casi el 23% trabajan en TV, el 17% en la radio y apenas un 4% en agencias de noticias.



Fuente: Worlds of Journalism, p. 81

- La correlación mujeres-hombres periodistas dentro de un medio cambia mucho según el país de que se trate. Los países donde hay una mayor presencia femenina en medios periodísticos son de Europa del Este: Letonia, Rusia, Bulgaria y Rumanía, por este orden, todos ellos con porcentajes superiores al 60%.

- Llama la atención en el lado opuesto de este ranking particular, cómo en Estados Unidos, uno de los países con mayor tradición en la profesión, las mujeres periodistas apenas representan el 27,1% del total de las personas que trabajan en las redacciones.

- En cuanto a los patrones de empleabilidad, el estudio indica que si bien en la profesión entran más mujeres que hombres (ellas más que ellos completan sus estudios de Periodismo o Comunicación en la Universidad), su presencia cae drásticamente en los grupos de edad entre 35 y 45 y 45 y 55 años. Esto hace que haya más hombres veteranos y que ellos ocupen más puestos de responsabilidad que ellas en las redacciones.

Este importante estudio, más allá de las particularidades de cada país o zona del mundo, pone de manifiesto dos aspectos clave para el futuro de la profesión: por un lado, la experiencia profesional dentro de las redacciones emerge como el indicador más sólido y definitorio para medir el prestigio y fijar la estabilidad de la labor periodística; por otro, el valor creciente de la formación universitaria dentro de la profesión: el porcentaje de periodistas con estudios de Grado y Máster en las redacciones ha crecido 20 puntos respecto al anterior estudio global de 1998.

sábado, 9 de noviembre de 2019

Xavier Ginesta: "Si Barça y Real Madrid no facilitan que se haga un periodismo deportivo de calidad, el periodismo deportivo se convierte en periodismo rosa"

Xavier Ginesta, en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla.

Xavier Ginesta es periodista y profesor de Periodismo y Comunicación en la Universitat de Vic, donde imparte diferentes asignaturas en grado y posgrados ligadas al mundo del deporte, pero también al de la política. Autor de decenas de artículos académicos, y referente en el estudio de las estrategias de comunicación y los sistemas de gestión empresarial que siguen las principales ligas y clubes de fútbol, hemos conversado con él en unas jornadas de investigación en comunicación celebradas recientemente en Sevilla para conocer un poco más sus publicaciones, así como su visión sobre el estado del periodismo deportivo, tanto desde el plano práctico como desde el ámbito académico.

- En un momento en el que los clubes de fútbol se han dotado de poderosos departamentos de comunicación y muchas redacciones periodísticas han ido menguando en efectivos, asistimos a una nueva relación entre las fuentes y periodistas que cubren su información. ¿Cuáles han sido los principales cambios en este nuevo escenario?
- Creo que el principal cambio de la relación entre fuentes es el de la digitalización. Ya en 2009, cuando hice mi tesis doctoral, lo que constatamos era que los grandes clubes de fútbol españoles (Barcelona y Real Madrid) tenían más capacidad de adaptarse al entorno digital, ya que podían organizar sobre todo fábricas de contenidos dentro de los clubes y, por tanto, sortear todo lo que era la presión mediática para a través de generar medios propios para contactar directamente con los públicos. “Factorías de contenidos” fue el concepto que manejamos para definir la idea de utilizar los medios propios de los clubes gracias a la digitalización para poder abrir mercados y, sobre todo, convertir los clubes en multinacionales de entretenimiento.
Este es un concepto que ya teorizó David L. Andrews en su libro Manchester United: A Thematic Study, donde estableció cuatro ideas principales para entender la transformación de los clubes en multinacionales de entretenimiento: la firma de grandes contratos de patrocinio globales (dejar los espónsors locales e ir a los internacionales que tuvieran intereses comunes en los grandes mercados); la firma de convenios de colaboración con ligas extranjeras o competiciones deportivas en mercados emergentes, como por ejemplo la Major Soccer League o la NFL; la creación de contenidos propios por parte de los de los clubes de fútbol; y finalmente las acciones de responsabilidad corporativa, que en el caso español seguramente el Barcelona fue el que tuvo un éxito más arrollador con el contrato de patrocinio solidario con Unicef. 
Estas cuatro ideas son las que teoricé en mi tesis para entender el nuevo concepto de multinacionales de entretenimiento como base para poder entender también luego la importancia de la industria del fútbol en la economía mundial.

- ¿Y desde la tesis hasta hoy?
- Hoy en día lo que estoy haciendo es precisamente ir desarrollando esa idea de la multinacional del entretenimiento, sobre todo entendiendo que estamos ya no delante de los grandes clubes de fútbol, como los top 20 de Deloitte; no son simplemente organizaciones deportivas sino empresas que participan del gran mercado del entretenimiento global y, por lo tanto, lo que hacen es competir con News Corporation, con Disney o con Fénix Group.

- Usted explica muy bien en diferentes artículos ese concepto de multinacionales del ocio o del entretenimiento. ¿En qué medida esa priorización que se hace de dicha línea de negocio en el funcionamiento general de esas grandes organizaciones deportivas está incidiendo en su política de comunicación? ¿Acaso la atención a los medios ha dejado de ser una prioridad?
- Si hablásemos con los periodistas que están cubriendo información del Barcelona el Real Madrid, nos dirían que sí. Es decir que los medios de comunicación locales o nacionales tienen verdaderos problemas para poder tener información al día de lo que pasa en la organización y, por tanto, es la agenda de contactos y de filtraciones la que acaba marcando la agenda informativa. Lo que sí está claro es que los grandes clubes tienen unas prioridades informativas que van más encaminadas a focalizarse en aquellos mercados donde el interés comercial es creciente que en crear una relación de simbiosis con el periodista local, como ocurrió en su momento y como en teoría la historia de la prensa ha marcado.
El periodista del Barça o del Madrid hoy en día ve perfectamente cómo la cobertura cada día es más complicada y las fuentes de información están más cerradas. Los jugadores no salen al final del partido pero, por otro lado, ven perfectamente cómo Messi en su momento se va a Argentina a jugar con la selección y da entrevistas a Argentina. ¿Al final a Messi qué le interesa, dar entrevistas a Argentina o en Barcelona? En Argentina porque sabe que es el mercado que no tiene controlado aunque sea el nuevo Maradona.
Por ejemplo, el Barcelona tenía ya en el año 2006 una división de comunicación internacional que se dedicaba a monitorizar a los medios de los nuevos mercados donde quería ir hacer la pretemporada. De esta forma, veía cómo podía gestionar tácticamente la información para poder impactar en nuevos mercados a través de los medios de comunicación. O sea que al final lo que ves es que el departamento de comunicación es claramente más un departamento de relaciones públicas. Y la camaradería periodística desaparece en pro de una gestión táctica de la información mucho más similar a lo que hace un gabinete político con los periodistas.

"El departamento de comunicación del Barça o el Madrid es más de relaciones públicas. La camaradería periodística desaparece en pro de una gestión táctica de la información mucho más similar a lo que hace un gabinete político con los periodistas" 

 
- Si los dircom o los responsables de comunicación de un club son más un obstáculo que un aliado, que un facilitador de la información, ¿qué lugar queda ahora para el periodista que cubre esa fuente?
- A mí me preocupa. Yo lo veo en los estudiantes de periodismo deportivo; todos tienen ganas de poder hacer el Barça, pero cuando se encuentran cubriendo una rueda de prensa en la Ciudad Deportiva y ven las dinámicas y las rutinas que establece el departamento de comunicación del club con los periodistas, ven que hay cosas que fallan. También cuando hablas con los periodistas en Madrid y te dicen que Florentino es un plenipotenciario incluso en los medios de comunicación por la presión que ejerce como lobby a los directores de los periódicos, ves perfectamente que hay alguna cosa que no cuadra.
Por eso clubes y asociaciones de la prensa tienen que empezar a reflexionar porque, obviamente, si estos clubes no facilitan que se haga un periodismo deportivo de calidad, el periodismo deportivo se convierte en periodismo rosa. Y lo más problemático de todo es que al final estamos trabajando todo el día a partir de la especulación. Desde un punto de vista periodístico, cuando hago análisis deportivo por los medios donde tengo algunas colaboraciones pactadas durante la semana, hablo más en función de la filtración que me haga un compañero o de lo que yo supongo que puede pasar que no por el hecho de que haya una información absolutamente transparente ofrecida por los clubes.
También es verdad que los clubes atienden en función de sus resultados. Si sobre el césped las cosas le han ido bien al equipo, es más fácil, pero si el equipo va mal, se cierran más y por tanto eso implica que sea siempre complicado saber cuándo es el momento oportuno para poder llamar a la puerta.
Desde un punto de vista académico, las investigaciones indican que en la medida que la digitalización ha permitido que los clubes tengan medios propios, los clubes cada vez más han sido menos dependientes de la prensa…

- Y, de hecho, controlan la agenda temática y tienen la capacidad para producir más contenido diario que incluso algunas redacciones de medios o secciones de Deportes.
- Sí, el Barcelona ya en 2006, y ahora seguramente sigan haciendo cosas similares, producía seis horas semanales de contenidos para el mercado estadounidense. Es un ejemplo.

- Si el periodismo deportivo tiene cada vez más difícil acceso al futbolista; si el club tampoco facilita que haya ruedas de prensa diarias para facilitar un contenido que haya que cubrir; y sigue haciéndose una cobertura deportiva centrada en el fútbol aunque no siempre se pueda conseguir noticias de este deporte, ¿entonces el periodismo deportivo no debería buscar más otras temáticas?

- Tendría que buscar otras áreas, sí, pero sobre todo lo que tenemos que saber hacer en España es salir del monopolio que hacen los dos grandes clubes de los cuatro grandes periódicos deportivos. Y por tanto tenemos que entender que el periodismo deportivo va mucho más allá de hacer veinticinco páginas de Barça o del Real Madrid por parte de esos diarios. ¿Es difícil? Sí, porque al final también la agenda está muy influenciada por su actividad, porque son dos marcas brutales. Solo el Barcelona tiene monitorizados 300 millones de fans en todo el mundo. Lo que tenemos que hacer es volver a los orígenes del periodismo deportivo cuando Marca y Mundo Deportivo abrían el periódico con una portada de boxeo, ciclismo, natación, etcétera.
Lo que sí se observa, desde hace un par de años o tres, es una pequeña evolución en lo que respecta a la cobertura del deporte femenino en medios autonómicos de radio y televisión en Cataluña y Baleares, que son los que por razones profesionales y personales mejor conozco. Se trata de una apuesta muy interesante y muy clara por la diversificación de los contenidos, de forma que cada vez hay más noticias de mujeres deportistas o estamos empezando a ver secciones de deportes en las telenoticias que abren con deporte femenino. Este ha entrado en la agenda mediática, es verdad que menos de lo que debería, pero mucho más de lo que estaba antes.

- Los nuevos medios y las posibilidades que ofrecen las plataformas digitales también abren opciones para la especialización para llegar a temáticas a las que no se llegaba antes. Hablamos de newsletters, de podcasts,… ahí sí hay mucho por hacer, ¿no?
- Exacto. Y luego lo que hay son nuevos periodistas que salen de las facultades que quieren romper con esas dinámicas tan dictatoriales que se iniciaron en el último tramo del siglo XX (fnales de los 70), un periodo en el que al final los grandes periódicos deportivos se posicionaron básicamente por dos contenidos básicos: Barcelona y Real Madrid.
Sí, los chicos está rebotándose, y las chicas piden paso y esto es muy importante. Yo tengo alumnas en clase que me dicen “yo quiero hacer contenidos de fútbol femenino” o he tenido estudiantes que han preferido ser freelances y buscar temas de periodismo de investigación deportivo en lugar de hacer de plumillas para el Barcelona o el Real Madrid. Vemos que hay un cambio también de mentalidad de los chicos que no quieren estar en la dinámica de los grandes medios en el sentido de que no quieren ir a la Ciudad Deportiva todos los días ni oír hablar a un jugador o un entrenador diciendo siempre lo mismo. Hay una pequeña revolución y, a pesar de las dificultades del mercado periodístico deportivo, que se guía mucho por lo irracional, hay que apoyar y aplaudir a estudiantes que quieren hacer algo distinto y todas esas iniciativas que permiten romper un poco el monopolio de los cuatro grandes.

- ¿Podemos afirmar entonces que hay razones para el optimismo de que esto pueda mejorar o cambiar en un futuro cercano?
- Hace diez años, cuando yo hacía la tesis, diría que no, que la Academia era una especie de burbujita de reflexión crítica sobre la profesión. Hoy diría que sí y, además, estoy muy esperanzado. Muchos de los alumnos actuales de las facultades no se dejarán manipular por los redactores jefes ni los directores de periódicos tanto como los de hace  veinte años. Tienen una conciencia crítica más desarrollada. Y lo que ha supuesto un cambio enorme es la inclusión de la perspectiva de género en el periodismo deportivo. Por lo menos en las facultades ha sido una revolución para que el periodismo deportivo se vea desde un punto de vista de análisis crítico.