martes, 2 de septiembre de 2014

Un recorrido por la historia del deporte de competición desde el punto de vista del espectador

La importancia social adquirida por el deporte en las sociedades contemporáneas es un hecho incontestable. Así lo corroboran tanto los datos de afluencia de público a los recintos deportivos para presenciar las competiciones como los principales estudios de medición de impacto y audiencia de los medios y programas periodísticos dedicados al fenómeno deportivo, que son, con diferencia, los más seguidos y consumidos en un gran número de países. En la consecución de este éxito han participado de manera decisiva los medios de comunicación, que, desde la eclosión del deporte-espectáculo a principios del siglo XX, han discurrido de forma paralela a la evolución de las diferentes modalidades hasta su implantación actual.

Sin embargo, abordar el estudio de su historia es muy complejo porque el deporte se comporta como una manifestación de la cultura de masas, abarca ingredientes sociológicos, su evolución se explica a partir de la interrelación con corrientes artísticas y literarias y que solo se puede comprenderse de forma plena dentro del contexto político de cada época. Se trata, por tanto, de un terreno transversal, para el que ni siquiera existen criterios claros ni uniformes a la hora de delimitarlo conceptualmente (ni diccionarios ni enciclopedias se ponen de acuerdo; partiendo de su sentido original de ‘ocio’, ‘recreación’ o ‘pasatiempo’, la palabra "deporte" ha evolucionado hasta adquirir actualmente significados diversos como ‘juego’, ‘arte’, ‘práctica’, ‘actividad’ o ‘ejercicio físico’); y de una actividad de carácter universal que tiene una enorme incidencia en la conformación de las mentalidades y conductas de los ciudadanos.

Por la dificultad que comporta acotar una materia de estas características y por la singularidad que constituye ofrecer una visión global de un fenómeno de tanta complejidad, y hacerlo además desde una perspectiva original, resulta muy relevante el libro Floodlights and Touchlines: A History of Spectator Sport, de Rob Steen y publicado hace unos meses en el Reino Unido por la editorial Bloomsbury. Steen es un reputado periodista con experiencia en medios como The Guardian, The Independent, The Financial Times, The Sunday Telegraph o The Sunday Times, trabaja como profesor de Periodismo en la Universidad de Brighton y es autor de varios libros relacionados con la historia del deporte y la praxis del periodismo deportivo, entre los que se encuentra el manual Sports Journalism: A Multimedia Primer Paperback (2007).

En Floodlights and Touchlines, Steen propone un recorrido en diez capítulos por el origen y evolución del deporte de competición explicado a través de su repercusión y seguimiento por parte de los espectadores. Así parte desde los comienzos del sport moderno en los XVIII y XIX al amparo de la Revolución Industrial en Inglaterra, donde se conciben los primeros deportes con reglas establecidas y comienzan a organizarse y unificarse las primeras competiciones (las carreras de caballos y el boxeo eran entonces los deportes más seguidos) y donde pioneros de Rugby School como su director Thomas Arnold (1785-1842), y luego otros colegios privados, se encargaron de expandir los juegos reglamentados entre los alumnos con el fin de desarrollar en ellos valores como la iniciativa, la solidaridad, la competitividad y el juego limpio o fair play.

En esa etapa, en la que el deporte seguía siendo una actividad recreativa o de ejercicio físico para élites masculinas (los gentlemen), el sport prosiguió su difusión por el resto de Europa y alcanzó otros continentes siguiendo las rutas del Imperio Británico, de forma que muchas de las modalidades reglamentadas por los ingleses experimentaron un gran desarrollo en las colonias y países que formaron la Commonwealth. Hasta tal punto fue así que deportes como el críquet ("un juego indio que de forma accidental descubrieron los ingleses", dice Steen) llegaron a crecer y desarrollarse más rápido que en la propia metrópoli (a finales de siglo XVIII se funda el Calcutta Cricket Club y en EE.UU., dos décadas antes de que empezarse a hablarse de béisbol, la primera crónica de un partido de este deporte entre londinenses y neoyorquinos data de 1751).

Entretanto, la restauración de los Juegos Olímpicos de la era moderna, gracias al barón de Coubertin en 1896 en Atenas, marcó una nueva etapa en la evolución del deporte como una actividad de masas y, por consiguiente, como una área que exigía un tratamiento informativo cada vez mayor por su progresivo alcance social.

Paralelamente y partiendo de las modalidades reglamentadas que habían llegado de Inglaterra, en EE.UU. se desarrollaron nuevos deportes, como el fútbol americano, que surge en las universidades más prestigiosas (Ivy League) como escisión del foot-ball original y que nace como tal en 1869 en Nueva Jersey en un partido interuniversitario entre los Rutgers y Princeton; o el baloncesto, inventado por James Naismith, un profesor de educación física en un instituto de Springfield (Massachusetts) en 1891. Asimismo, reseña el autor la propia evolución del deporte en Norteamérica hacia la profesionalización desde prácticamente sus inicios al contrario que en el Reino Unido, donde pagar por jugar se veía como "el primer gran tabú" y un anatema para los gentlemen. Las grandes Guerras Mundiales, por medio de los soldados contendientes, sobre todo los estadounidenses, también fueron vehículos de expansión del deporte por todo el mundo.

Hitos del crecimiento internacional del deporte

Entre los hitos del nacimiento del deporte-espectáculo, Steen enumera las siguientes fechas en las que se celebraron por primera vez grandes eventos o en las que vieron la luz clubes, ligas y federaciones:

. 1836: Grand National
. 1839: Henley Regatta
. 1843: Fundación del primer club de rugby, Guy´s Hospital
. 1848: Primeras reglas de fútbol asociación en la Universidad de Cambridge
. 1851: Copa del América de vela
. 1855: Fundación del Sheffield Football Club, el club más antiguo del mundo aún existente
. 1857: primer campeonato de golf en Escocia
. 1858: primera liga, la National Association of Base Ball Players (EE.UU.) (nótese que base ball entonces se escribía separado)
. 1859: primera gira internacional de un equipo, la de la selección inglesa de críquet por Norteamérica; y primer club de fútbol australiano, el Melbourne FC, fundador de las reglas de este deporte
. 1860: primer major de golf, el Golf British Open
. 1862: primer club de fútbol fuera de Gran Bretaña, el Oneida FC en Boston
. 1863: fundación en Londres de la Football Association, la primera organización rectora del deporte rey
. 1864: primer campeonato de críquet (County Championship)
. 1867: Belmont Stakes, una de las carreras de caballos más importantes de cuantas se celebran en EE.UU.
. 1869: primer equipo profesional de béisbol, los Cincinnati Red Stockings
. 1871: primer partido internacional de rugby, Inglaterra-Escocia y primera asociación de liga profesional, la National Association of Professional Base Ball Players.
. 1872: primer partido internacional de fútbol, Escocia-Inglaterra, y primera final de la FA Cup
. 1876: primer club de fútbol europeo fundado fuera de Gran Bretaña, el Kjøbenhavns Boldklub, en Copenhague (Dinamarca)
. 1877: All England Tennis Championships en Wimbledon
. 1882: primer campeón del mundo de boxeo de pesos pesados, John L. Sullivan
. 1883: primer torneo de rugby a quince (International Championship)
. 1884: las mujeres juegan en Wimbledon por primera vez
. 1885: primer partido internacional de fútbol sin británicos, EE.UU. contra Canadá
. 1888: nace la Liga inglesa de fútbol (Football League)
. 1889: primeras federaciones de fútbol lejos de las Islas Británicas, en Dinamarca y Países Bajos
. 1891: French Championships de tenis, antecedente de Roland Garros
. 1892: primer jugador profesional de fútbol americano, William "Pudge" Heffelfinger
. 1893: Stanley Cup (hockey hielo)
. 1895: US Open de golf y primer partido profesional de fútbol americano
. 1900: Copa Davis de tenis
. 1901: primer partido de fútbol internacional en Sudamérica, Uruguay 2-3 Argentina
. 1903: Tour de France, World Series (béisbol) y Campeonatos del Mundo de gimnasia artística

Deportistas episódicos

Este repaso histórico se efectúa, además, a través de episodios llamativos y curiosos protagonizados por deportistas en diferentes países y competiciones. Entre otras historias, se encuentran, por ejemplo, la del pastelero italiano Dorando Pietri, que ganó de forma dramática el maratón de los Juegos Olímpicos de Londres en 1908 pero que fue posteriormente descalificado después de que uno de los técnicos de la prueba le ayudara a cruzar la meta. Tal fue el estupor y la indignación popular que originó esta descalificación que Arthur Conan Doyle, autor de la saga Sherlock Holmes y quien presenció lo ocurrido desde las gradas como enviado especial al evento del Daily Mail, promovió una iniciativa para recaudar fondos con el fin de restablecer el honor de Pietri.

Rob Steen también rememora lo acontecido a Bernhard Carl Trautmann, piloto alemán de la Luftwaffe que combatió con los nazis en la Segunda Guerra Mundial y, tras caer prisionero en el Reino Unido, renunció a su repatriación para dedicarse a jugar al fútbol, consagrándose además como uno de las figuras de la Premier League como portero del Manchester City entre 1949 y 1964. Su estancia en Inglaterra le impidió jugar en la selección de su país.

Otro episodio que el autor refleja en este libro es la personalidad del chino Zhuang Zedong, tres veces campeón del mundo de tenis de mesa e ídolo nacional de la época, que, durante el Mundial en Nagoya (Japón) de 1971, se acercó el jugador estadounidense Glenn Cowan para hacerse ante la prensa una foto que, en plena Guerra Fría, provocó meses después la primera visita de una delegación de Estados Unidos al país asiático por primera vez desde la Revolución Cultural. A aquel gesto de Zedong se le conoce como la "diplomacia del ping-pong".

Etimología de palabras deportivas

El estudio de la historia del deporte también lo es del origen y evolución de sus palabras. Rob Steen también aprovecha para recordar la etimología de algunos de los vocablos y expresiones habituales en el ámbito deportivo como goal, cuya primera referencia en lengua inglesa, con el significado de 'límite' o 'punto de llegada', se sitúa en un verso de principios el siglo 14 del poeta William De Shoreham, quien curiosamente la escribió como lo haríamos hoy en español (gol): "Daz hy [God] nabbe ende ne for be gol".

O también de tenis, vocablo procedente de la voz francesa "tenez", del verbo tenir, que significa ‘recibir’ o ‘contener’ la pelota. El autor apunta que en los inicios de este deporte, el jugador que ejecutaba el saque gritaba a su rival “tenez!” (¡toma!, ¡ahí va!), para avisarle de que le enviaba la pelota, siguiendo así con la tradición de uno de los antecedentes más directos del tenis, el jeu de paume, deporte medieval francés, en el que este aviso era también común entre los caballeros que lo practicaban.

A través de deportistas célebres y de pioneros que forjaron las primeras grandes competiciones, este libro cuenta la historia "del deporte que vemos, no el que jugamos", se ocupa de aquellas modalidades en las que los resultados se proyectan más allá del marcador y de los campos de juego por lo que movilizan entre aficiones, del nacimiento y el desarrollo de deportistas profesionales y de los contextos socioculturales, económicos y políticos que lo hicieron posible o lo impidieron. Floodlights and Touchlines son 544 páginas de cultura deportiva. Un libro imprescindible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario